De nuevo me encuentro empezando una nueva etapa profesional, ante tanta crisis y tanto empresario cagón, con miedo a invertir, las PYMES se autocierran las puertas unas a otras, y eso es como la pescadilla que se muerde la cola, y se van arrastrando unos a otros.
Cada vez lo veo más claro, todos somos una manada de pingüinos descabezados y vamos al mogollón, sin saber ni controlar a donde vamos, alguién nos marca el camino y vamos como los bobos detrás.
La parte buena de todo esto, es que es una manera indirecta para que todos nos pongamos las pilas, y para que el reciclaje y el espíritu emprendendor fluya de una manera más fluida (valga la redundancia) y natural.
Embriagado por todo este ambiente que me rodea, y obligado por la cruda realidad y situación tan difícil que está pasando la empresa en la cual había estado trabajando éstos últimos años, me veo obligado a hacer un punto y aparte.
Sólo me queda dar las gracias al equipo de Gongo Labs, por esos maravillosos años, en los cuales he crecido a nivel profesional y mucho más a nivel personal. Pero esto no es un adios, sino un hasta muy pronto…. SUERTE CHICOS, SOIS GRANDES
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